Una foto que resume el "Train Market". Estamos en Maeklong, en Tailandia.
Aunque parezca increíble, por este sitio de la foto pasa el tren todos los días. Es el mercado de Maeklong, en Tailandia. Aunque todo el mundo lo conoce como el mercado del tren, sin duda la plaza de abastos más original de un país lleno de curiosos mercadillos.
El mercado oficial está en la calle paralela a las vías del tren, pero como se quedó pequeño los vendedores fueron poco a poco conquistando el exiguo espacio que quedaba entre las paredes del edificio y la vía férrea. Como el tren de cercanías solo llega dos veces al día (a las 8,30 y a las 11,30) y además la vieja estación de Maeklong es su destino final y entra muy lento a nadie pareció importar ese pequeño inconveniente. Unos funcionarios aparecen cinco minutos antes con unos silbatos y unas banderas anunciado la llegada de la máquina. Entonces los vendedores recogen con urgencia los toldos, retiran las mercancías, esperan que pase la unidad…. y vuelven a colocarlo todo tal cual estaba.
¡Esto es Tailandia, el país donde todo es posible!
Pero más que la originalidad del emplazamiento, lo que llama la atención de este mercado – de casi cualquier mercado tailandés-, es la pulcritud con la que se exhiben las mercancías, el gusto por el detalle, la delicadeza del diseño, la voluptuosidad de las texturas, el festival de colores. Un paseo por las vías del mercado del tren de Maeklong es un deleite para los sentidos.
Los tailandeses son amantes de la armonía y la belleza y en medio del caos habitual de un mercado asiático, de los chaparrones del monzón, de la anarquía de los toldos desvencijados o de los olores de los regueros de aguas sucias existe un método, una disciplina. Asombra la elegancia de unos pescados colocados en perfecta simetría, el equilibrio de unas cazuelas de bambú para cocer las caballas, la rugosidad de la piel de los rambutanes, el color mórbido de unas guayabas…
Es la belleza que sobrevive al caos. La irresistible simetría del desorden.
Cómo llegar
El viaje hasta Maeklong desde la capital tailandesa Bangkok ida y vuelta, nos costará la friolera de 46 bahts (1,08€).
Para ello habrá que coger dos trenes y un mini ferry
La estación de salida desde Bangkok es la de Wongwian Yai y tras un recorrido de 70 km que durará unos 50 minutos, llegaremos a la última parada, la estación de Maha Chai.
Allí habrá que coger un mini ferry para cruzar el río Tha Chin ya que no hay puente ferroviario que lo cruce, y al otro lado está la estación de Ban Laem desde donde ya cogeremos el tren que pasará por el mercado justo antes de llegar al final de la línea, la estación de Mae Klong.
Cada trayecto en tren son 10 bahts (0,23€) que entre ida y vuelta son 4 trayectos. Más los dos pasos por el ferry, uno ida y otro vuelta a 3 bahts cada trayecto (0,07€).
Ferry para cruzar el río Tha Chin |
Estación de Ban Laem |
Estación final de Maeklong |
Estación final de Maeklong |
"Muere lentamente quien no viaja, ni lee, quien no sueña, quien no confía, quien no lo intenta"
Pablo Neruda